En medio de un escenario interno fragmentado, el Partido Justicialista nacional volvió a reunirse en la sede de la calle Matheu. La convocatoria, encabezada por el PJ bonaerense y fuerzas aliadas, tuvo como eje principal el respaldo a Cristina Fernández de Kirchner tras la confirmación de su condena, aunque no dejó definiciones en materia electoral ni avances en el armado de listas.
El primer encuentro comenzó al mediodía y reunió a referentes de espacios políticos alineados con Unión por la Patria: Sergio Massa, Guillermo Moreno, Juan Grabois, Alicia Kirchner y Martín Sabbatella participaron del debate.
No estuvo presente el Movimiento Derecho al Futuro (MDF), liderado por Axel Kicillof, aunque sí fue invitado el Frente Grande, cuyo referente, Mario Secco, es un dirigente cercano al gobernador.
Pese a los esfuerzos por mostrar una imagen de unidad, el peronismo bonaerense atraviesa tensiones internas que complican el objetivo de acordar listas conjuntas para las elecciones provinciales del 7 de septiembre y 26 de octubre. Las diferencias entre Máximo Kirchner y Kicillof siguen siendo el principal obstáculo.
En la previa de este cónclave, Kicillof había conversado con Cristina Kirchner sobre la posibilidad de impulsar listas de unidad, respetando la representación de intendentes y dirigentes con mayor peso territorial.
Sin embargo, tras el fallo de la Corte Suprema que ratificó la condena a la exmandataria, esa discusión quedó en suspenso. “El escenario cambió y hay que barajar y dar de nuevo”, afirman en el entorno del gobernador.
Desde el kirchnerismo indicaron que los espacios convocados —Frente Renovador, Principios y Valores, Patria Grande, Kolina, Nuevo Encuentro y Frente Grande— forman parte de los aliados de Unión por la Patria que impulsan la campaña "Argentina con Cristina", con acciones en territorio y campañas de afiliación.
Durante la tarde está prevista una segunda reunión con otros sectores, donde podría sumarse el MDF. En el kirchnerismo justifican su ausencia en el primer tramo asegurando que no se trata de un partido político formal, sino de un movimiento.
La participación del espacio depende también de las conversaciones que mantiene el gobernador con Federico Otermín, intendente de Lomas de Zamora y enlace designado por Máximo Kirchner para acercar posiciones.
Uno de los puntos más sensibles de la discusión gira en torno a las candidaturas. Aunque Kicillof repite que "no habrá vetos", los 42 intendentes que respaldan al MDF exigen que quien encabece las listas tenga buena imagen y capacidad de tracción electoral.
Según una encuesta de la consultora Synopsis, difundida en la gobernación, el 45% de los votantes de Sergio Massa en el balotaje 2023 prefiere a Kicillof como nuevo líder del peronismo tras la condena a CFK. En contraste, Máximo Kirchner aparece último, con menos del 10% de apoyo.
Por ahora, el diálogo entre Kicillof y Otermín continúa, pero no hay fecha concreta para un encuentro formal ni definiciones sobre la inclusión del MDF en las futuras negociaciones.