Una carga impresionante de casi 500 kilos de cocaína fue hallada en el interior de un barco de bandera de las Islas Marshall que atracó en el puerto de la empresa Vicentín en San Lorenzo. La ministra de Seguridad de la Nación, Patricia Bullrich, brindó detalles del descubrimiento en una conferencia de prensa programada en la mañana de este jueves en la sede de Prefectura de San Lorenzo, que participó en el procedimiento bajo las órdenes del fiscal Claudio Kishimoto.
Según informaron desde la Agencia de Recaudación y Control Aduanero (Arca), el buque mercantil Ceci, que zarpó de Dubai y se dirigió a Países Bajos con una carga declarada de pellets de girasol, escondía una carga de narco valorada en aproximadamente 6 millones de dólares. Aunque las estimaciones de la cantidad de droga hallada variaron, se mencionaron cifras de 400, 467 o incluso hasta 482 kilos.
Se supo que fue el propio capitán de la embarcación quien notó la presencia de bolsos sospechosos en las cámaras frigoríficas. Tras comunicar esta anomalía al armador, las autoridades alertaron. Sin embargo, aún no está claro cuándo y cómo se contaminó la carga, ni si la tripulación o el personal del puerto tuvieron alguna implicación directa.
Al fondear el Ceci, los agentes de Aduana hallaron esos bolsos extraños en la heladera donde se guardaba la comida. Un perro antinarcóticos, llamado Cuero, olfateó los bultos, lo que llevó a las autoridades a profundizar en la investigación. Los portavoces oficiales indicaron que los bultos presentaron imágenes de coronas en bajorrelieve, lo que sugirió la posible participación de un cártel específico en el operativo.
La tripulación del buque estuvo compuesta por 21 filipinos. Pese a que se catalogó el hallazgo como un hecho histórico, no fue la primera vez que un puerto en la región fue utilizado como punto estratégico en el tráfico de cocaína. En 2022, al menos dos cargamentos de cocaína fueron incautados en Brasil y Países Bajos después de haber partido de Terminal Puerto Rosario (TPR).
A causa de estas investigaciones, quedó demostrado que los grandes volúmenes de cocaína realmente salieron de los puertos de la ciudad, desmitificando una creencia que circuló durante años. En el contexto de esta causa, surgió la técnica conocida como “gancho ciego”, mediante la cual rompieron precintos aduaneros para insertar bolsos con droga entre cargas legales, revelando así una posible complicidad con el personal del puerto.
Otro caso relacionado fue el secuestro de más de 1.500 kilos de cocaína en agosto de 2022, encontrado en un depósito en Empalme Graneros, una zona marcada por la violencia entre bandas. Los narcos colombianos Gabriel Jaime Londoño Rojas y Newson Cheung Sabogal estuvieron directamente involucrados en la supervisión de ese cargamento, mientras que Gabriel Andrés Nicolau, condenado a 12 años, fue señalado como el coordinador local. Su vinculación con el apodado “El Español” o “El Gallego” subrayó el alcance de las organizaciones dedicadas al tráfico internacional de drogas en la región.