La «Marcha Universitaria Federal» está programada para hoy a las 15:30. El punto de encuentro será la Plaza del Congreso, ubicada en la esquina de las avenidas Rivadavia y Callao. Desde allí, partirán columnas provenientes de las 13 facultades de la Universidad de Buenos Aires, con destino al centro de la ciudad. Una de las zonas de mayor concentración será la Plaza Houssay, donde se encuentran las facultades de Economía, Medicina, Farmacia y Bioquímica, y se sumará también la Facultad de Derecho.
Las diferentes columnas marcharán hacia la Plaza de Mayo, con el objetivo de converger allí a las 17:30. El acto central comenzará a las 18 horas y contará con la presencia de autoridades de la UBA, rectores de universidades nacionales, alumnos, y representantes de docentes y no docentes.
En cuanto al operativo de seguridad, el Ministerio de Seguridad de la Nación y la Secretaría de Seguridad de la Ciudad de Buenos Aires han estado coordinando acciones para contener la movilización. Se pondrá en marcha un centro de comando unificado entre ambas administraciones, que funcionará tanto de manera presencial como virtual, para monitorear minuto a minuto la marcha.
Si bien los organizadores aseguraron que no habrá cortes de calle ni piquetes, el Gobierno Nacional y la administración porteña están alertas ante la posibilidad de interrupciones en el tráfico. En este sentido, la ministra de Seguridad, Patricia Bullrich, manifestó la intención de aplicar el protocolo antipiquetes, dependiendo de la masividad de la convocatoria.
Además, el Ministerio de Seguridad desplegará oficiales de las cuatro fuerzas federales: la Policía Federal Argentina, la Gendarmería Nacional, Prefectura Naval Argentina y la Policía de Seguridad Aeroportuaria. Estas fuerzas se concentrarán en la vigilancia de edificios nacionales y en los accesos a la Ciudad, para evitar bloqueos.
Desde la organización de la marcha, resaltaron su compromiso con mantener una protesta pacífica y señalaron que hubo diálogo con las autoridades gubernamentales para organizar la marcha y evitar disturbios. «Sería un error enorme que reprimieran a los estudiantes y docentes», advirtieron los rectores de la universidades el lunes en una conferencia de prensa.
