El presidente Javier Milei firmará en breve cuatro decretos que reforman las fuerzas federales a través de las facultades delegadas de la Ley Bases, y que incluyen una reestructuración de la división y la cantidad de agentes en cada fuerza junto al sistema de reclutamiento.
El Ejecutivo modificará las leyes orgánicas de Gendarmería, Prefectura Naval, la Policía de Seguridad Aeroportuaria y del Sistema Penitenciario Federal con cambios en sus funciones, estructura y misiones. La iniciativa se publicará dentro de poco en el Boletín Oficial, informó el portal de TN.
Los textos ya pasaron por los equipos técnicos del jefe de Gabinete, Guillermo Francos y de la ministra de Seguridad, Patricia Bullrich, trascendió. Se apunta además a delimitar las zonas y misiones exclusivas con la intención de evitar superposiciones en operativos comunes, como en la contención de marchas en la plaza del Congreso o Plaza de Mayo.
El Ejecutivo basa la reforma de las fuerzas de seguridad en el modelo de los Estados Unidos, en el que cada cuerpo tiene una asignación especial, capacidades propias y una diferenciación detallada en los operativos, evitando así las superposiciones de funciones.
En el marco de esta reformas, el oficialismo transformó semanas atrás la Policía Federal Argentina en un cuerpo de investigación a imagen y semejanza del FBI de los Estados Unidos. En su órbita funcionará un Departamento Federal de Investigaciones (DFI), que tiene atribuciones como la detención de personas sin una orden de un juez por un plazo de diez horas en casos con indicios de que hayan cometido un delito.
También, el Gobierno quiere transformar la Policía de Seguridad Aeroportuaria (PSA) en una policía de transporte, que se encargue sólo de los recaudos de seguridad en la infraestructura relacionada con la actividad de trenes, colectivos y aviones.
