La decisión del Senado de la provincia de Buenos Aires de aprobar la reelección indefinida para legisladores volvió a encender la tensión política. La medida fue avalada en una votación empatada, con 22 votos a favor y 22 en contra, y desempatada por la presidenta de la Cámara Alta, Verónica Magario, quien inclinó la balanza en favor del proyecto.
La reacción opositora no se hizo esperar. Malena Galmarini, referente del Frente Renovador, fue una de las primeras en salir al cruce: “Si la política no se autooxigena, te oxigena el pueblo sacándote a patadas en las elecciones”, lanzó en sus redes, donde también destacó que los legisladores massistas votaron en contra de la iniciativa.
Qué dijo el PRO
Desde el PRO, el diputado Cristian Ritondo acusó al gobernador Axel Kicillof de “destruir la provincia” y llamó a la oposición a redoblar esfuerzos electorales para “terminar con el populismo”. En sintonía, José Luis Espert tildó la propuesta como un “abuso de poder” que busca “blindar privilegios”.
Otros referentes opositores, como el senador Alex Campbell y el diputado Diego Santilli, coincidieron en señalar que la medida representa un retroceso institucional y un ataque a la alternancia democrática. Florencio Randazzo fue más allá y fustigó: “En una provincia con crisis de seguridad, educación y salud, los senadores se ocupan de asegurarse un sillón eterno”.
La Libertad Avanza también sumó su rechazo. La dirigente Florencia Arietto, quien transmitió la sesión en sus redes, remarcó que la votación terminó empatada y acusó a la senadora Magario de permitir que prosperara la iniciativa. En sus publicaciones, apuntó contra el senador Marcelo Daletto, a quien responsabilizó por “votar con el kirchnerismo” a favor del proyecto.
Sin embargo, Arietto también valoró gestos en sentido contrario, como el de la massista Sofía Vanelli, quien votó en contra de la reelección indefinida y defendió la ley impulsada por su espacio que limitaba los mandatos. “La alternancia permite que aparezcan nuevas voces y evita que el poder se atrinchere en los cargos”, expresó la senadora.
Aunque por ahora no se definieron medidas judiciales, varios legisladores anticiparon que podrían impulsarse sanciones parlamentarias. El debate se traslada ahora a la Cámara de Diputados bonaerense, donde la iniciativa continuará su trámite legislativo en medio de fuertes cuestionamientos.