En la antesala del fallo clave de la Corte Suprema sobre la causa Vialidad, el peronismo salió a rechazar con dureza una posible ratificación de la condena a Cristina Fernández de Kirchner.
Referentes del Peronismo denunciaron una "persecución judicial" y advirtieron sobre las implicancias institucionales de una sentencia que, según sostienen, responde a motivaciones políticas.
“La causa está plagada de irregularidades. Consideramos fundamental que la Corte Suprema de Justicia admita el recurso extraordinario presentado por la defensa de Cristina Kirchner y revise la sentencia dictada por el TOF N.º 2”, expresó Sergio Massa, líder del Frente Renovador y excandidato presidencial de Unión por la Patria.
Desde el Congreso, el diputado nacional Leopoldo Moreau también cuestionó el proceso. “No sé si se va a definir algo hoy, lo que ya ha definido la gente es que hoy, mañana, pasado y cuando sea va a salir a enfrentar esta decisión política que no tiene nada que ver con lo jurídico”, dijo en declaraciones a TN.
Y sumó: “Es un caso muy parecido al de la jueza Makintach: el juez que la condenó a Cristina jugaba al fútbol en la quinta de Macri, que era el que la acusó. Tendrían que haber separado a los jueces”.
Más contundente fue el dirigente social Juan Grabois, quien sostuvo que se está gestando “la ruptura definitiva del orden constitucional argentino”.
Según Grabois, “la detención de la expresidenta de la Nación y Presidenta del principal partido de oposición, Cristina Fernández de Kirchner, es un estado de sitio encubierto y el inicio de una virtual dictadura”. Además, convocó a movilizarse: “Ahora concentramos en la sede del PJ en Matheu 130, pero hay que estar atentos minuto a minuto”.
Edgardo Depetri, referente sindical y político, se sumó a los cuestionamientos y señaló que lo que ocurre “es un verdadero escándalo”. Y afirmó: “Hay una venganza de la Corte y los poderes concentrados. Buscan proscribir a Cristina porque saben que les gana la elección”.
También anticipó medidas de fuerza: “Vamos a accionar, vamos a salir a la calle con un paro general y movilizarnos en todo el territorio nacional”.
En ese mismo tono, calificó de “violento” el accionar del máximo tribunal, y afirmó que se está acusando “a una persona sin ninguna prueba”. Y concluyó: “Nosotros estamos ejerciendo el derecho democrático a manifestarnos”, concluyó.
Por su parte, Alexis Guerrera, presidente de la Cámara de Diputados bonaerense, advirtió: “Nada es más peligroso para la democracia que una sentencia que no busca la verdad, sino confirmar una narrativa”.
Desde el Senado, el jefe de bloque de Unión por la Patria, José Mayans, fue enfático: “El Gobierno es un cachivache y tiene un programa económico que se cae a pedazos. La respuesta política es que quieren meter presa a Cristina en un juicio que está viciado de nulidad”.
Y concluyó: “La Justicia argentina mira para otro lado en muchas cosas, pero ahora actúa de manera acelerada porque quieren sacarla de la cancha. Tienen miedo de que arrase en la provincia de Buenos Aires y sea la próxima presidenta de la Nación”.
