«Atentos a las necesidades del campo»: así comienza el mensaje del ministro de Economía, para anunciar la medida que se aplicará a la urea y sus mezclas con nitrato de amonio para bajar el costo de los fertilizantes. Caputo aseguró que «el ordenamiento de las variables económicas» fue un factor clave para esta decisión.

Esta medida se da en la antesala de una siembra de trigo que hasta el momento se presenta difícil por la pérdida de rentabilidad. Aunque está en sintonía con la rebaja de aranceles para importaciones de herbicidas anunciada el lunes, Caputo afirmó que “en haras de mejorar su competitividad, vamos a avanzar en la eliminación de los aranceles aplicados a la urea y sus mezclas con nitrato de amonio, que actualmente se ubican en 5,4 y 3,6%”.

A través de su cuenta de X, el funcionario remarcó que esta decisión “se suma a los beneficios generados por el ordenamiento de las variables económicas, que permitió que el costo de estos insumos fundamentales para el productor agropecuario bajara de U$S 830 (la tonelada) desde el 15 de febrero a 570 en la actualidad”.

En la previa de la cosecha gruesa, la cámara cerealera relevó que en marzo las empresas del sector liquidaron la suma de USD 1.501 millones de dólares, un 22% más que el año pasado. Y en términos trimestrales la mejora fue de 61% en relación con el mismo lapso de 2023.

El año pasado el consumo de fertilizantes fue de 4,5 millones de toneladas, 4% menos en relación a 2022 por efecto de la sequía, de acuerdo a la información de Fertilizar Asociación Civil. Del total, el 65% correspondió a productos importados, principalmente urea y MAP (fósforo), siendo Marruecos, Estados Unidos, Egipto y China los principales países de origen.