El gobierno volvió a realizar una fuerte advertencia contra las universidades a pocas horas de la marcha en defensa de la universidad pública que se realizará el próximo martes por la tarde frente a la Casa Rosada. “No vamos a permitir que las Facultades sean utilizadas por los políticos de turno”, sentenció el portavoz Manuel Adorni hace minutos, en su habitual conferencia de prensa, en referencia a las declaraciones de diferentes autoridades de la Universidad de Buenos Aires (UBA).

En su alocución, Adorni hizo hincapié en que el gobierno había alcanzado un diálogo con el sector universitario, después de ofrecer un aumento del 70% de las partidas del gasto de funcionamiento en marzo y prometer otro aumento del 70% en mayo. “Se dispuso una partida extraordinaria para los hospitales universitarios de $14.403 millones”, agregó el portavoz. 

Tanto el rector de la Universidad de Buenos Aires, Ricardo Gelpi, como el vicerrector, Emiliano Yacobitti, desmintieron que se haya alcanzado un acuerdo, horas después del comunicado donde el gobierno aseguraba esto. De hecho, el Consejo Interuniversitario Nacional (CIN) publicó un comunicado en ese sentido.

“Nosotros consideramos que efectivamente existieron las conversaciones y que hubo acuerdo en virtud de los números presentados”, aseguró Adorni, quien criticó a las autoridades por el reclamo presupuestario. “Nos seguimos preguntando por qué levantan la voz ahora y no el año pasado cuando la inflación fue del 211% y han sufrido tamaño ajuste real en sus partidas”, consideró.

“No es que no es genuina por los alumnos, sus reclamos son genuinos. Lo que no consideramos genuino es que desde un escritorio incentiven a que esto ocurra”, agregó Adorni, quien aseguró que el gobierno “valora la educación pública, laica y federal” y que están “lejos de permitir que sean usadas por los políticos de turno para beneficio propio”.

También criticó el funcionamiento de las distintas universidades públicas, la falta de actualización de los contenidos y la caída de los índices de egresados.

“Hace décadas que entendemos que las universidades funcionan con severos problemas. Las facultades están en malas condiciones edilicias, los profesores no cobran por su trabajo, hay matrículas con contenidos que no se actualizan hace 30 años y los índices de terminalidad educativa vienen cayéndose a pedazos”, manifestó Adorni, quién también aseguró que 6 de cada 10 estudiantes abandonan en el primer año universitario y que 3 de cada 10 logran terminar la carrera. “De los sectores vulnerables, pocos pueden acceder a la educación universitaria”, sentenció el portavoz.