Recientemente trascendió la noticia de que Norberto Milei, el padre del presidente de la Nación, Javier Milei, se encuentra internado en el Sanatorio Otamendi de la Ciudad de Buenos Aires por un cuadro de anemia.
Norberto, quien tiene ya 80 años, fue llevado al centro de salud esta mañana y permanece acompañado por su hija, la secretaria de Presidencia, Karina Milei, hermana del presidente.
La última aparición pública de Norberto fue el 10 de diciembre pasado, en la Asamblea Legislativa en el Congreso, el acto de la asunción a la presidencia de su hijo.
Hace menos de un mes fue Alicia Luján Lucich, la madre del presidente, quien debió ser internada, también en el Sanatorio Otamendi.
El pasado 19 de febrero la mujer fue trasladada al centro de salud por a un cuadro de hipertensión. Allí fue sometida a estudios y tras ser derivada a una habitación común donde la estabilizaron, pudo retirarse del lugar.
Por el momento no se saben más detalles de la hospitalización de Norberto Milei.
La difícil relación de Milei con sus padres
En varias ocasiones, Milei se refirió a la difícil relación que mantuvo con sus padres a lo largo de su vida. Una relación marcada por la violencia, tanto física como psicológica. Llegó a tildarlos de “tóxicos”, llegó a estar distanciado de ellos durante varios años, y antes de retomar contacto, por intermediación de su hermana Karina, los llamaba “mis progenitores” en entrevistas.
También llegó a decir que no tuvo una relación “ni buena, ni mala”.
A Norberto y a Alicia se los vio muy pocas veces en público. Una de las primeras oportunidades en las que los padres del presidente hablaron con la prensa fue en la puerta de la sede del Hotel Libertador poco antes de que se conocieran los resultados del balotaje. “Javier está muy contento, hablamos por teléfono y nos dijo que vengamos”, manifestaron los padres del presidente en ese momento al canal de televisión TN.
